El shi o schi (щи) es una sopa rusa cuyo ingrediente principal es la col, una de las plantas más fundamentales de la cocina rusa.

Con este nombre de difícil pronunciación para cualquier extranjero, se denomina una de las más famosas sopas rusas. Cuando el escritor noruego Knut Hamsun la probó, dijo que era imposible comer cualquier otra comida después de esta. Aunque sus palabras tienen una cierta exageración, la cuestión es que no se excedió tanto.

La verdad es que la sopa schi goza de una popularidad constante en Rusia desde hace un milenio. Sin ella es imposible imaginar la cocina de este país. Las primeras menciones de este plato se remontan al siglo IX.

Los gustos y las épocas han cambiado, pero las schi nunca han dejado de estar en el menú ruso, tanto de los zares como de los pobres, aunque bien es cierto que su contenido podía variar. De todos modos el ingrediente principal de esta sopa es la col (fresca o aderezada en salmuera).

Se dice que hay más de mil maneras de prepararlo. Una de las más comunes es con chucrut, o sea col agria, verduras y una proteína como res, cerdo o incluso salmón, acompañada con un toque de hoja de laurel. Como en otras sopas rusas, no puede faltar una cucharada de crema para darle sabor y espesor.

Las schi es uno de los pocos platos que no pierde su sabor durante la conservación. Al contrario, se cree que es mejor reservar la sopa durante algún tiempo; los expertos incluso afirman que la sopa congelada tiene un sabor más rico.

En los tiempos antiguos, durante el intenso frío, las schi se congelaban en una suerte de cesto especial hecho de corteza de abedul de tamaño de un balde y así se la llevaban en viajes largos. En caso que fuera necesario, cortaban un pedazo de la sopa helada, la descongelaban y comían.

La importancia del shi en la vida cotidiana de los rusos se resume en la frase «shi da kasha – pisha nasha», es decir: “el shi y la kasha – nuestra comida”. En la actualidad, el shi es una parte esencial de la dieta rusa por su sencillez, ligereza y calidad nutricional. En México, el platillo más parecido es la sopa preparada con dos tipos de col: el repollo, una especie de col verde con hojas anchas, y la lombarda, que es de color morado. Ambas, como el shi, son una receta sumamente saludable, ideal para mantenerse en forma.

(Autor: Rainer Matos)