Etiqueta: drink

Mors (морс)

El mors  es una bebida rusa no carbonatada preparada con bayas, principalmente arándanos rojos (y en ocasiones arándanos azules, fresones o frambuesas). Está constituido por zumos fermentados y filtrados mezclados con almíbar y agua potable. En lugar de zumo se pueden utilizar extractos de fruta con aditivos como esencias aromáticas, azúcares, colorantes y agua potable. En algunas recetas el zumo se hierve y después se enfría.

Морс из калины с сахаром

Se mencionó por primera vez en el siglo XV en el antiguo libro ruso «Domostroy», que se puede traducir al inglés: «Cómo construir una casa». Este libro es un manual para la vida familiar y familiar. Pero, los historiadores están seguros de que el mors es más antiguo que el siglo XV. La palabra «mors» proviene de la antigua palabra griega «mursa».

Mors es un buen método para conservar las bayas, y es por eso que esta bebida se generalizó en Rusia.  En la antigua Rusia, cada ama de casa tenía su propia receta de mors, y estas recetas se transmitían de madre a hija. Algunos de ellos eran bastante inusuales; por ejemplo, se puede agregar leche o algunas especias.

También es popular en los países escandinavos: Finlandia, Noruega y Suecia. Actualmente, el mors se utiliza también en la coctelería.

Té (чай)

El té como bebida se menciona en los manuscritos pertenecientes a los años 2700 a.C., pero su uso como planta cultivada por los chinos se refiere al siglo IV.

Apareció en Rusia en 1638 cuando el can de Mongolia envió al zar Mijail Románov como regalo 4 pudes (medida antigua rusa de peso = 16,3 kg) de hoja de té. Medio siglo más tarde, en 1679, fue firmado con China un acuerdo de suministros regulares a Rusia que en el siglo XVIII llegaron a ser enormes, y el té iba suplantando infusiones tradicionales frutales y herbáceas.

De estos tiempos data de la aparición de los primeros samovares rusos. En 1906, Rusia importó 100 mil toneladas de té (la población del imperio contaba con 126 millones de personas según el censo de 1897). Para tomarlo se servía panadería de todo tipo: bizcochos con pasas, roscas y rosquillas, bollos, ensaimadas, pastelones, y empanadas con centenas rellenos: de legumbres, de setas, de carne y frutas.

En el norte de China, zona con la que tradicionalmente Rusia mantuvo relaciones comerciales, el té se llama “chai”, mientras que en las ciudades del sureste del país, donde solían anclar los barcos europeos, lleva el nombre de “tie” o “tii”. De aquí proviene la palabra “chai” en ruso y otras formas similares en turco, portugués y la mayoría de las lenguas eslavas y “té” o similares en la mayoría de países occidentales europeos. (Russia Today)

Los rusos suelen decir que la familia cuyos miembros no toman té juntos, tiene problemas. Ese proceso les une, pues supone charlar de lo más íntimo. Otra idea asociada es la que muestra el refrán ruso “si quieres deshacerte de los huéspedes no esperados, dales té de ayer”.

Aunque desde la introducción de la infusión en Rusia se conocía la existencia del té verde, el negro tradicionalmente gozó de mayor popularidad en Rusia. Últimamente esta infusión está cediendo cada vez más ante el café matutino y la cerveza o los cócteles vespertinos. Sin embargo, las tiendas de té nunca están vacías y en todos los hogares se puede encontrar en la cocina.

Champaña soviética (Советское шампанское)

Aunque en el extranjero piensan que en Rusia beben sólo vodka, no es así. Hoy vamos a relatarles del Champán Soviético.

Proviene de los vinos de champán producidos por el príncipe Golitsyn en su hacienda de Crimea «Novyi Svet», los cuales obtuvieron el Gran Premio en la exposición mundial de 1900 en Paris.

El creador de Champán Soviético, Antón Frolov-Bagréev, invitado a trabajar de químico en 1904 en la hacienda de los zares Abráu-Diursó, colaboró con Golitsyn. Después de la revolución bolchevique, para hacer más barata la producción de champán (según la tecnología original, el producto se fermentaba en botellas), el científico elaboró una tecnología de fermentación en cisternas: se mantenía el procedimiento clásico (champenoise) de preparación del champán, siendo mucho más bajo su costo y calidad.

Ya a finales de los años 1940 la nueva bebida se convirtió en atributo imprescindible de la mesa festiva de cada familia soviética.

Russian President Vladimir Putin makes a toast during a ceremony for receiving diplomatic credentials from foreign ambassadors in the Kremlin in Moscow, Russia, Wednesday, Nov. 9, 2016. Putin says that Moscow is ready to try to restore good relations with the United States in the wake of the election of Donald Trump.(Sergei Karpukhin/Pool photo via AP)

Vodka (водка)

El vodka, al parecer la bebida alcohólica más pura y simple de producir, es el resultado de un proceso de destilación relativamente complejo que no fue inventado hasta el siglo XV. Sin embargo, la relativa juventud del vodka —tiene unos 8000 años menos que el vino— no le impidió ganar rápidamente gran popularidad en Europa del Este y Rusia.

El difícil cultivo de la vid en climas fríos impulsó el estudio del potencial de la fermentación alcohólica de los cereales. Estas exploraciones condujeron al descubrimiento de lo que se llamaría “el vino de pan”, que se destiló por primera vez en un monasterio del Gran Ducado de Moscú y luego surgió, aparentemente, en la capital alrededor de 1440.

Además del vodka más tradicional hecho a base de cereales o de patata o de ambos, existen otros tipos de aguardiente como la kliúkovka (a base de arándanos), pertsovka (a base de pimienta), starka (de hojas de manzano o de peral) o limónnaya (de limón) entre otros. La palabra rusa “vodka” tiene la misma raíz que “vodá” (agua).

El término se consolidó entre los siglos XIV y XV y fue cambiando de sentido con el tiempo. El primer significado autónomo que tuvo fue “vino” pero en los siglos XIX-XX empezó a utilizarse para designar bebidas alcohólicas de fuerte graduación producidas por la fermentación de grano o patata.

El proceso moderno de elaboración del vodka, el sabor del cual nosotros sabemos actualmente se formó en 1936 con aprobación de su estándar del estado. El origen del vodka causó una controversia internacional a finales de la década de 1970 cuando Polonia trató de reclamar que se conocía al vodka dentro de las fronteras del Reino de Polonia mucho antes de que éste se conociera en el Imperio ruso.

El historiador Viliam Pojliobkin tardó años en investigar y confirmar que el vodka se tomaba en Moscovia en el siglo XV, mientras que Polonia no pudo probar que el vodka local se produjera antes de mediados del siglo XVI. Rusia, indiscutiblemente, ganó la disputa internacional sobre la invención del vodka y mantiene sus derechos como su bebida nacional.

Kvas (квас)

Durante siglos, el kvas ha sido la bebida preferida de los rusos en la época de los sofocantes calores estivales.

Literalmente, la palabra “kvas” quiere decir “levadura de pan”. Se trata de una bebida alcohólica fermentada muy suave (el más fuerte ronda los 2,2% de concentración alcohólica), aunque también existen variedades sin alcohol.

Su sabor resulta intermedio entre un refresco y la cerveza. Se elabora con harina de centeno y malta o también con harina de salvado y un poco de pan de centeno. La mezcla se deja fermentar en agua. A veces, durante el proceso se le añaden frutas. Gracias a las levaduras que se utilizan en su fabricación, el kvas es una buena fuente de vitamina B.

La peculiaridad de esta bebida en la gastronomía rusa es que se emplea también como base líquida para cocinar una sopa de verano tradicional llamada “okroshka”, que se sirve fría. Hoy en día, la fabricación de kvas en Rusia se ha desarrollado en una industria con un volumen de ventas de miles de millones de rublos. La fermentación se realiza en tanques de 250 000 litros. Después de pasar allí dos días, el kvas es enviado a la planta de embotellamiento.

La versión sin alcohol se produce en las cervecerías más famosas del país. Una de ellas, por ejemplo, tiene capacidad para fabricar dos millones de litros de esta bebida por día.

El kisel (кисель)

El kisel es una antigua bebida rusa, rica y saludable. Se puede preparar de frutas, hortalizas, miel o grano (avena, centeno, trigo etc.).

Por lo visto, el kisel era una bebida muy valorada por los rusos, como se aprecia por su presencia en el folclore nacional, en particular en los cuentos. Así, en algunas antiguas narraciones rusas, los protagonistas llegan a países encantados donde fluyen ríos de leche con orillas de kisel.

De hecho, esa combinación de productos se consideraba un verdadero manjar. Se conoce un caso en el que el kisel salvó a toda una ciudad. En las crónicas antiguas hay un cuento que narra esta historia.

En el año 997 la ciudad de Bélgorod fue asediada por los pechenegos. Al pasar un tiempo los habitantes de la ciudad se quedaron casi sin reservas de comida y cuando ya estaban dispuestos a entregar la ciudad al enemigo, los salvó el ingenio de un anciano. Este les recomendó preparar kisel usando lo que quedaba de harina y miel, meterlo en barricas y colocarlas en los pozos de la ciudad. Después de hacerlo, los ciudadanos invitaron a los caudillos de los pechenegos a negociar y les ofrecieron beber el agua de los pozos de Bélgorod.

Al ver que en vez del agua de los pozos sacaban kisel, los pechenegos pensaron que la propia Tierra ayudaba a los habitantes de la ciudad y las reservas de comida nunca se agotarían. Los invasores decidieron no perder el tiempo y se retiraron.

Zakuski (Закуски)

Zakuski significa, literalmente, aperitivo. Su principal función es el maridaje con el vodka u otras bebidas fuertes.

El zakuski se presenta a modo de buffet y se sirve como entrada, previa a la comida formal, o durante alguna festividad. Se dispone una mesa especial para ello.

Hay diversas clases de aperitivos rusos, desde los sencillos como arenque, queso y pan, o platos más elaborados. Algunos rusos consideran a las sopas como parte de este maridaje, principalmente con los contenedores que la mantienen a buena temperatura para poder degustarla en cualquier momento.

Las ensaladas son una parte indispensable de la mesa de zakuski y pueden incluir una ensalada típica rusa como la vinagreta, shuba u olivié, pepinos encurtidos, remolacha, tomates, cebollas y repollo, huevos rellenos, queso y pan.

El zakuski incluye también una amplia variedad de carnes y embutidos, como tocino, jamón, pollo, etc. Y claro, no podían faltar el caviar, arenque, salmón ahumado, copos de cebolla, limón, anguila y calamar.

Muchas recetas rusas son similares a las recetas polacas y ucranianas.