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Bandejas de Zhostovo (Жостовские подносы)

La técnica de pintura en las bandejas de Zhostovo, la cual se realiza en el poblado homónimo ubicado a 30 kilómetros al norte de Moscú, se ha consolidado desde hace más de dos siglos como un arte popular que combina la pintura y el laqueado.

Las primeras bandejas se hicieron en Zhostovo en 1807, cuando Filipp Nikitich Vishnyakov fundó su taller. Después de mudarse a Moscú, su hermano Taras continuó con el negocio familiar. Yegor Vishnyakov comenzó la fabricación de lacas de papel maché y metal en la aldea de Ostashkovo a 2 km de Zhostovo en 1815, y Osip Filippovich Vishnyakov, cuyo nombre se asocia con el florecimiento de la artesanía, abrió su taller en 1825.

Para la elaboración de esta artesanía, son tres personas las que intervienen: un herrero, que producía el utensilio; un espadín, que cubría la bandeja con una capa de tierra, y un pintor. Después de que la bandeja secaba, se cubría con laca.

En la técnica Zhostovo se usan siempre pinceles redondos, y el trabajo debe iniciarse desde el centro de la superficie a pintar, una vez definido cuál será la composición elegida de entre las tres principales: centro, guirnalda o ramillete. Es en la zona central donde se agruparán las figuras de mayor tamaño, para ir disminuyendo hacia la parte exterior. Para un correcto uso de la técnica, debe cuidarse el sombreado y la combinación apropiada de colores claros y oscuros para conseguir el efecto de profundidad deseado.

Podemos observar una influencia de las técnicas utilizadas en las Miniaturas de Fedoskino, por ejemplo, los motivos sobre los cuales se pintaba como eran los carruajes de troika, fiestas de té y escenas de personajes rústicos. Sin embargo, con el tiempo se fue definiendo el estilo actual de composiciones florales decorativas.

El arte de Zhostovo tuvo dificultades durante la década de 1920 y 1930 debido a lo reacio de las corrientes soviéticas, de cierta manera incompatibles con las características de estos ornamentos. Aún así, en 1940, la escuela vocacional Fedoskino abrió un departamento de pintura Zhostovo para entrenar a jóvenes artesanos.

En la década de 1960 comenzó una nueva etapa que continúa hasta nuestros días, en la cual diversos artistas especializados en esta técnica han recibido el honorable título de Artista Emérito de Rusia, además de que sus obras se conservan como tesoro nacional y son exhibidas por los principales museos nacionales.

 

Miniatura de Fedoskino (федоскинская миниатюра)

La miniatura de Fedoskino es un tipo de pintura de laca tradicional rusa con óleo en papel maché, creada a finales del siglo XVIII en la aldea Fedoskino, en las afueras de Moscú. Las cajas y estuches de Fedoskino son decoradas con flores, escenas de la vida campesina rusa, copias de pinturas de artistas rusos y occidentales, todo ello realizado con enorme destreza.

A finales del siglo XVIII, el mercader Ivan Korobov instaló una fábrica de laca en la aldea de Danilkovo (ahora Fedoskino). A principios del siglo XIX, esta fábrica fue heredada por Piotr Lukutin, y las pinturas comenzaron a venderse en el extranjero, también conocidas como pinturas de laca de Lukutin.

La pintura se realizaba con óleos, con pinceladas compactas y trazos finos, con capas de transparencia. A menudo, se usaban hojas de oro, plata, nácar y polvos metálicos que se mostraban a través de la capa de pintura translúcida.
La pintura lacada de Lukutin, proveniente de Fedoskino, disfrutó de la influencia del arte realista ruso. La proximidad de los artistas al folclore propició la creación de imágenes muy populares. Las escenas de fiestas de té, reuniones de mujeres y paseos en troika tenían éxito entre los compradores.
El trabajo de laca llevado a cabo por las fábricas de la región de Vishnyakov tenía mucho en común con el de Lukutin en términos de forma y contenido, sin embargo, durante casi un siglo, fueron buenos modelos de influencia mutua. En 1904, los herederos de Lukutin cerraron sus trabajos de laca. Los antiguos maestros de Lukutin organizaron en 1910 el trabajo de Fedoskino, lo que contribuyó a la competencia entre fábricas de lacas pequeñas y sentó las bases para un proceso artístico conjunto. una nueva etapa se introdujo en la pintura de Fedoskino.
Después de la Revolución de 1917, el arte de Fedoskino atrajo a jóvenes artistas, cuyo trabajo reflejaba la vida de ese período, las etapas en el desarrollo del Estado soviético, y el pasado histórico de Rusia.
Las obras de los artistas de Fedoskino se muestran en colecciones privadas y en los museos de todo el mundo.

Vodyanoi (Водяной)

En la mitología eslava, un vodyanoi es un espíritu masculino de agua dulce. En la tradición rusa se le describe como un anciano desnudo con cara de rana, con una barba verdosa y con el cuerpo cubierto de escamas y algas, con manos y pies palmeados como los de un anfibio y con ojos brillantes como carbones encendidos; en otras tradiciones, sobre todo la de los eslavos occidentales como checos, eslovenos y eslovacos, el vodianói tiene una apariencia mucho más humana (y un carácter un poco más apacible).

En cualquier caso, todo vodyanoi vive en algún río o lago, pues supuestamente, el agua de mar les hace daño. Suelen permanecer bajo el agua, pero a veces salen a la superficie, normalmente para interactuar con aquellos que hayan entrado en su territorio sin permiso.

Si bien no todos los vodyanoi son malvados, se les atribuyen aquellos desastres relacionados al agua, como cuando alguna persona se ahoga o se destruye una presa. Por ello, para apaciguarlos, la gente solía dejarles ofrendas a las orillas de los ríos y los lagos.

En algunos idiomas eslavos, vodyanoi es también la palabra que se utiliza para referirse al signo zodiacal de Acuario, ya que la palabra «vodyanoi» significa literalmente “acuoso”.

Entre los aztecas, una entidad similar era Xólotl, dios que se ocultó en las aguas y se transformó en un ajolote (que significa “monstruo del agua” al combinar atl + xólotl).

(Autor: Rainer Matos)

Koschei el Inmortal (Кощей Бессмертный)

Koschei el Inmortal es una figura del folclore eslavo, cuya capacidad de evadir la muerte, irónicamente, no era infalible debido a un error en el hechizo imperfecto que emitió para protegerse del daño exterior.

Koschei mantuvo su vida y la inmortalidad a través de la eliminación de su alma. Un huevo contiene la aguja que tenía el corazón de su poder. Lo escondió en una aguja, dentro del huevo, y luego lo cerró con llave en un cofre, y lo enterró debajo de una encina en una isla. Según el mito, la posesión del huevo era suficiente para obtener el control sobre Koschei.

En los diversos relatos en que figura, no se detalla su físico, pero se le percibe como hosco y desagradable. Koschei suele ser descrito mientras monta su caballo encantado por las montañas de Rusia.

Este personaje, quien aparece tanto como un monstruo o un ser humano, secuestraba a sus víctimas femeninas en forma de un tornado torbellino.

Una historia popular en la que aparece Koschei es “La princesa rana”, también conocido como “Vasilisa la Sabia y el príncipe Iván”, cuando el villano encierra en sus dominios a la doncella hasta que Iván Tsarevich emprende la travesía a su encuentro.

Ivan Tsarevich (Иван-царевич)

Ivan Tsarevich o Iván el príncipe es uno de los personajes principales del folclore ruso. Es protagonista de diversas historias tradicionales del país, y por ello suele ser representado en contextos distintos, aunque algunos en común son el hecho de que Ivan es el menor de tres hermanos, cuenta con habilidades mágicas y es portador de la espada Kladenets.

El antagonista de Ivan Tsarevich suele ser Koschéi el inmortal, un ser malvado de apariencia horrible y senil que representa una amenaza para las mujeres jóvenes.

En el cuento «Los tres reinos», él, es hijo de Nastasya. En otras leyendas, se relaciona a Iván con varias esposas, incluyendo a Yelena, Vasilisa y Marya Morevna.

Algunos cuentos que narran aventuras de éste joven son «Iván Tsarévich y el Lobo Gris», «La princesa rana«, «El Rey del Mar y la sabia Vasilisa», y «Marya Morevna».